A continuación algunas fotos con personas que han participado en nuestros programas de formación o a quienes hemos acompañado en eventos formativos. El encuentro directo con la gente, tanto antes como después de los eventos, constituye la otra gran riqueza de este apostolado bíblico. En efecto, si la enseñanza bíblica no parte de la realidad de las personas y comunidades pierde su vigencia y actualidad y se convierte en mera especulación intelectual.

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A lo largo de estos años he tenido la oportunidad y el privilegio de conocer gente maravillosa, de todas las condiciones, profesiones, ideologías, religiones; así como de escuchar sus anhelos, inquietudes, dudas, preocupaciones, miedos, intereses, etc. Son relaciones que han derivado en auténtica fraternidad y amistad que prevalece a través del tiempo y la distancia. A todos ellos mi reconocimiento por su testimonio y por su interés en querer conocer y vivir cada vez mejor el evangelio de Jesús. ¡Gracias a todos por su presencia que alimenta y alienta mi vida!